PRECAUCIONES PARA EL BUEN CRISTIANO.
Las enseñanzas de Pedro nos recuerda que debemos compartir nuestras razones para
mantener la esperanza contra el dolor en el mundo, pero con "gentileza y
respeto". No puedes ser grosero o violento al intentar esparcir la
Palabra y los motivos de tu fe.
1-. Nunca pierdas la fe en Dios (aunque haya períodos de tu vida en los
que no puedas evitarlo, puedes sobreponerte, porque nadie es perfecto y
Él lo entiende).
2-. La Biblia dice “por sus frutos los conocerás”, pero eso significa
sólo que reconocerás las acciones positivas de los buenos cristianos; no
es una justificación para juzgar a otras personas como pecadoras o
asegurar que están alejándose de la salvación; sólo hay un juez apto
para decidir en nuestros corazones, y lo único que nos corresponde como
cristianos es amar a toda persona sin restricciones.
3-. No subestimes el poder de la oración.
4-. Cuando sientas dudas sobre cómo llevar una vida en virtud y justicia, pídele ayuda a Dios. "Y
si alguno de vosotros tiene falta de sabiduría, pídala a Dios, el cual
da a todos abundantemente y sin reproche, y le será dada."(Santiago 1:5).
5-. Puedes cambiar muchas cosas malas a través del poder de la oración,
pero no usarla para fines egoístas. Dios da respuesta a todas las
oraciones, y sabrá decir no "No," a las peticiones que se alejen de la
justicia o busquen causar daño. En realidad, lo único que deberías pedir
al orar es que Dios actúe sin limitaciones en tu vida, porque Él tiene
la medida justa de bendiciones y pruebas que necesitamos para ser
felices y lograr lo mejor para quienes amamos.
6-. En el Antiguo Testamento hay algunos libros que pueden no ser de
interés al creyente moderno, porque hablan de la genealogía, la historia
y el sistema legal de Israel hace miles de años. Hay sin embargo,
varios libros de profecía que pueden ser muy interesantes, como
Jeremías, Daniel e Isaías.
7-. Aprende a perdonar verdaderamente y no continuar mencionando las
antiguas ofensas cada vez que desees usarlas a tu conveniencia. Si en
verdad estás agradecido por lo que Dios te ha dado, puedes perdonar de
corazón a toda persona que te haya causado daño, de la misma manera que
Dios otorga su perdón a todo cristiano que se vuelve hacia Él con
arrepentimiento genuino; recuerda que debemos intentar seguir el ejemplo
del Señor.
8-. No ocultes tus talentos ni tus bienes del ojo de tu prójimo; intenta
actuar y compartir en toda la medida que esté a tu alcance. No juzgues a
las personas en condiciones adversas pensando que llegaron a esa
situación por desidia o como castigo por sus pecados; si Dios pone a
alguien en tu camino es muy probable que esa persona necesite de tu
ayuda porque Él eligió ese medio para hacérsela llegar.
9-. Jesús dijo "lo que hagan por el más pequeño de los míos me lo hacen a mí."
Esto también funciona a la inversa: cuando estés sufriendo el abuso o
el maltrato de otras personas por defender las convicciones de verdad, justicia, y amor tus enemigos, puedes soportarlo con la entereza de que ellos también están atacándolo a Él, y por tanto Dios siempre estará ahí para respaldarte.
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