miércoles, 23 de noviembre de 2016

LOS OBSTÁCULOS DE LA ORACIÓN. Parte I


   Durante los años que he ministrado la palabra de Dios, he visto mucha frustración en el pueblo de Dios. La razón de su frustración es porque sus oraciones no son contestadas; oran y oran y no ven respuesta. El señor se deleita en contestar  las oraciones de su pueblo. La palabra de Dios nos enseña que si pedimos conforme a su voluntad. Él nos oye. Si nuestras oraciones no están teniendo resultado que esperamos, entonces tenemos que encontrar la razón de este problema con la ayuda del Espíritu Santo. A continuación estudiaremos algunos obstáculos que impiden que las oraciones sean contestadas.

1-. EL NO PEDIR Y EL PEDIR MAL.

   La Palabra de Dios dice:
Codiciáis, y no tenéis; matáis y ardéis de envidia, y no podéis alcanzar; combatís y lucháis, pero no tenéis lo que deseáis, porque no pedís.Pedís, y no recibís, porque pedís mal, para gastar en vuestros deleites.Santiago 4.2-3

   Hay personas que piensan que Dios está muy ocupado. Otros piensan que sus peticiones son insignificantes para Dios, y que Él no está interesado en cosas pequeñas. Otros creyentes creen que las cosas que piden son muy grandes y que Dios no las va a contestar. Por está razón, yo le exhorto a que pida a Dios, pues Él quiere conceder todas las peticiones de su corazón. Si no las recibe, es porque no las pide; ya sea algo grande o pequeño, Dios quiere dárselo. La Palabra de Dios dice: pedis y no recibis, porque pedís mal, para gastar en vuestros deleites.

   Hay otros casos que son el extremo opuesto. Algunos creyentes piden, pero la intención de su corazón es el deleite de su carne. Sus deseos e intenciones son egoistas; piden para ellos y no tiene en cuenta el Reino de Dios ni el projímo, y lo más grave es que sus peticiones son conducidas por sus deseos carnales, tales como: celos, vanagloria, competencia, envidia entre otros. Las intenciones y los motivos son equivocados. ¿Cuál es la solución?. No deje de pedir. Pida al Señor lo que necesite, pero hágalo con la intención correcta. Pida primero para el Reino y luego, para usted y su familia. Si así lo hace, ya tiene resuelto uno de los obstáculos que impiden que sus oraciones sean contestadas.

2-. EL MALTRATO AL CÓNYUGE.

 Asimismo vosotras, mujeres, estad sujetas a vuestros maridos; para que también los que no creen a la palabra, sean ganados sin palabra por la conducta de sus esposas. 1Pedro 3.1

 Vosotros, maridos, igualmente, vivid con ellas sabiamente, dando honor a la mujer como a vaso más frágil, y como a coherederas de la gracia de la vida, para que vuestras oraciones no tengan estorbo.1Pedro 3.7

   El apóstol Pedro nos enseña dos roles: el del hombre y el de la mujer. A la mujer le dice que debe someterse a su marido y si no lo hace, es una forma de rebelión contra Dios. Al hombre le dice que trate a la mujer como un vaso frágil, porque si la trata bruscamente y no le da el amor que necesita y la maltrata física, verbal y emocionalmente, es una forma de desobediencia a la palabra de Dios. Dice, también, que si existe este comportamiento de parte de la mujer o del hombre, sus oraciones serán de estorbo y también cortadas. El maltrato hacia el cónyuge es un obstáculo a sus oraciones. Cambie su actitud hacia su cónyuge y obstendrá resultados positivo. ¿Desea que su oración sea contestada?. Entonces, usted esposo, empiece a tratar bien a su esposa, y usted esposa, empiece a someterse a su esposo.
 
3-. LA DUDA O LA INCREDULIDAD.

    La palabra duda en el  griego es "aporeo", y significa, literalmente, estar sin camino, estar sin recurso, en apuro, perplejo, en duda, confuso, en desesperanza, ansioso y vacilante acerca del camino que debes tomar. Una de las cosas que nos hace saber de Dios, es que la duda mata toda esperanza de recibir algo de él. Dudar es algo terrible; nos hace vacilar y nos confunde. La confusión es el resultado de una persona que duda. Analicemos algunas palabras que describe la palabra "aporreo" o duda:

  • Estar sin camino. No tener seguridad hacia dónde dirigirse o qué camino tomar, ya que en la mente tiene dos o más alternativas.
  • Estar sin recursos. Una persona que duda se siente que no tiene recursos para seguir.
  • Perplejo. Una persona que está en un estado de shock no sabe qué hacer .
  • Confuso. Tiene muchos pensamientos en su mente y no sabe qué decisión tomar. No tiene una decisión clara.
  • Vacilante. Ésta es la peor parte de la duda. El milagro llega, pero por ser tan vacilante, no lo recibe porque está esperando otra cosa.
¿Qué debemos aprender acerca de la duda?
   No podemos orar a Dios si estamos dudando de su existencia. Si estamos ansioso y confuso acerca de lo que estamos pidiendo, no podremos orar en confianza. Si estamos perplejo, no podremos orar en poder. Si vacilamos acerca de su voluntad, no podremos tener resultados en nuestras oraciones. Tenemos que cambiar nuestra actitud, y comenzar a creerle a  Dios y a su palabra sin dudar.
28 Entonces le respondió Pedro, y dijo: Señor, si eres tú, manda que yo vaya a ti sobre las aguas.29 Y él dijo: Ven. Y descendiendo Pedro de la barca, andaba sobre las aguas para ir a Jesús.30 Pero al ver el fuerte viento, tuvo miedo; y comenzando a hundirse, dio voces, diciendo: !!Señor, sálvame!31 Al momento Jesús, extendiendo la mano, asió de él, y le dijo: !Hombre de poca fe! ¿Por qué dudaste? . Mateo 14.28-31   

   En estos versículos,  podemos ver lo que le sucedio a Pedro que por dudar de la palabra de Jesús se hundió. Así ocurre hoy dia. Vemos a muchos creyentes hundidos en crisis, ¿porque dudan en su corazón? Cuando quitamos los ojos en Jesús y miramos las circunstancias que nos rodean. Pedro dijo: "pero al ver el fuerte viento tuve miedo. Al dudar, el miedo entra y la fe sale. Cuando somos victima del miedo nos hundimos con nuestros propios problemas. La duda no es otra cosa que poner fe en lo que el enemigo pueda hacer en contra de nosotros.

   Algunas veces, la duda viene en forma de dardo. El enemigo le envía un pensamiento contrario a lo ques está creyendo, pues él desea dividir su mente para que no se enfoque en un sólo pensamiento. Entonces, le pone a dudar entre el pensamiento y la palabra de Dios y el pensamiento malo, mientras que dios quiere que se enfoque y piense en Él y en su palabra.

¿Que hay que hacer cuando estos pensamiento de duda viene  a nuestra mente? Llevémoslo cautivo a la obediencia de Cristo. No debemos tener nuestra mente dicidida ni estar dudando estre sanidad y enfermedad, sino creer estamos sanos. No entretenga los pensamientos de enfermedad en su mente, sino repréndalos y échelos fuera.

 porque las armas de nuestra milicia no son carnales, sino poderosas en Dios para la destrucción de fortalezas. 2Corintios 10.4 
Guillermo Maldonado. LA ORACIÓN.Tercera edición 2005.Editorial GM Internacional . Miami FL. Pag. 101 a la105

sábado, 12 de noviembre de 2016

EL PERDÓN DE DIOS.


Ser buen cristiano significa tener el corazón libre de rencor y dispuesto a perdonar cuantas veces sea necesario. Pastor Cash Luna

   En el libro de Colosenses 2:13-16 dice: Y a vosotros estando muertos en pecados y en la incircuncisión de vuestra carne no tenían pacto, os dio vida juntamente con Él, perdonándoos vuestros pecados, anulando el acta de los decretos que había contra nosotros, que nos era contraria, quitándola de en medio y clavándola en la cruz, y despojando a los principados y potestades, los exhibió públicamente, triunfando sobre ellos en la cruz, por tanto, nadie os juzgue en comida o en bebida. 

   El pacto para el pueblo de Dios incluía la circuncisión. El Señor le habla a la gente que estaba muerta en pecado y en la incircuncisión de su carne. Habla de gentiles no de judíos.

   En una oportunidad, cuando mi hijo Juan Diego tenía 12 años, predicó sobre esta Palabra en la clausura de fin de año de su grupo. Los papás estaban invitados y aunque estaba muerto de miedo, se enfrentó a su responsabilidad. Realmente me impresionó la seguridad con la que habló. Dijo a los niños: “Si ustedes son rebeldes con sus padres, por eso es que de grandes son drogadictos. Y miren mujeres por no ser sujetas, y los hombres por no tratar bien a las mujeres es que ahora se están divorciando”. Luego agregó: “el Señor agarró el acta de los decretos que nos era contraria y la quitó de en medio”. Además, sacó unas hojas y dijo: “El diablo, cada vez que usted ha pecado ha escrito estas hojas, pero Jesús las agarró e hizo esto con ellas” y las rompió para ilustrar lo que decía. La gente empezó a llorar y fue tocada. Nunca olvidaré como me enseñó claramente lo que el Señor hace con nuestros pecados.

   Todos tenemos un juez, un fiscal y un abogado defensor. Cuando el fiscal, es decir, el diablo abrió su maletín y quiso sacar de allí todas las acusaciones que había escrito de ti, no encontró nada. El juez debe decirle: “Señor fiscal muéstreme las pruebas del pecado de este hombre”, y el fiscal le responde: “Pues fíjese que desaparecieron”, porque Jesús las clavó en la cruz del Calvario y todos nuestros pecados fueron perdonados.

   Cuentan que Martín Lutero estaba una noche en la cama y se le apareció el diablo que le entregó un gran listado de pecados. Él los empezó a leer y le dijo: “tienes razón, todos esos pecados los cometí yo, pero todos fueron quitados y lavados por la sangre del hijo de Dios”. Entonces, tomó un tintero rojo y se lo tiró. Por eso, en una de las paredes de su habitación había una mancha roja.

   La sangre del hijo de Dios ha limpiado de todo pecado y perdonó nuestras ofensas.

Ejemplo de perdón.
 
   No existe vida eterna sin perdón de pecados. Tal vez has buscado a Jesús porque tu matrimonio estaba mal y te ayudó a restaurarlo o has venido a los pies de Cristo porque tenías problemas financieros y te ha ayudado a salir adelante o porque estabas enfermo y por su llaga te sanó. Sin embargo, lo más importante es buscar a Jesucristo porque limpió nuestros pecados. La Biblia dice que estábamos destituidos de la Gloria de Dios (Romanos 3:23), y que la paga del pecado es muerte, pero la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús. Merecíamos la muerte y en Su misericordia nos dio el perdón de los pecados (Romanos 6:23). Así que alégrate porque somos pecadores perdonados.

   Una vez leí una calcomanía que decía: “Los cristianos somos salvos, no perfectos”, aunque a veces se piensa y juzga lo contrario. Nadie puede acusarnos y buscar perfección en nosotros porque somos limpios por el Señor.

   Jesús hizo del perdón nuestro estandarte, así que el cristianismo es sinónimo de perdonar. Como hijo de Dios, eres fruto de la misericordia y debes compartirla. Si en tu corazón aún hay rencor y puedes enumerar a las personas que “te las deben”, estás lejos de ser un buen cristiano.

   Dice la escritura en 1ra. de Pedro 2:21-25: Pues para esto fuisteis llamados; porque también Cristo padeció por nosotros, dejándonos ejemplo, para que sigáis sus pisadas; el cual no hizo pecado, ni se halló engaño en su boca; quien cuando le maldecían, no respondía con maldición; cuando padecía, no amenazaba, sino encomendaba la causa al que juzga justamente; quien llevó él mismo nuestros pecados en su cuerpo sobre el madero, para que nosotros, estando muertos a los pecados, vivamos a la justicia; y por cuya herida fuisteis sanados. Porque vosotros erais como ovejas descarriadas, pero ahora habéis vuelto al Pastor y Obispo de vuestras almas.

   Él llevó nuestros pecados en Su cuerpo, y por Sus heridas fuimos sanados. Padeció por nosotros, nos enseñó a perdonar y a soportar las ofensas sin pensar en venganzas. Devuelve bien por mal y bendice a tus ofensores para ser vivo ejemplo de tu Salvador.

Mártires en la vida diaria.
 
  Dice la Palabra en Hechos 7:54-55: Oyendo estas cosas se enfurecían en sus corazones, y crujían los dientes contra él. Pero Esteban, lleno del Espíritu Santo, puestos los ojos en el cielo, vio la gloria de Dios, y a Jesús que estaba a la diestra de Dios.

   Cuando estamos llenos del Espíritu Santo las ofensas son una oportunidad para ver la gloria de Dios. Cuando te ofendan, no mires a la gente, sino a Dios que te sonreirá en medio de las calumnias y problemas en tu contra. Nada importa si eres aprobado por el Señor con tu actitud humilde que perdona.

   Hechos 7:56-60 continúa el relato: He aquí, veo los cielos abiertos, y al Hijo del Hombre que está a la diestra de Dios. Entonces ellos, dando grandes voces, se taparon los oídos, y arremetieron a una contra él. Y echándole fuera de la ciudad, le apedrearon; y los testigos pusieron sus ropas a los pies de un joven que se llamaba Saulo. Y apedreaban a Esteban, mientras él invocaba y decía: Señor Jesús, recibe mi espíritu. Y puesto de rodillas, clamó a gran voz: Señor, no les tomes en cuenta este pecado. Y habiendo dicho esto, durmió.

   Este pasaje narra el martirio de Esteban, un hombre de Dios. Muchos anhelan ser mártires y morir por el Señor, pero nos son capaces de soportar la convivencia con el primo, suegro o hermano en Cristo. Dios no quiere que te apedreen, sino que seas capaz de tolerar los conflictos de la vida diaria. Además, Esteban no murió amargado sino en paz, perdonando a sus agresores y con los ojos puestos en Jesucristo que lo esperaba en el cielo. Pablo decía que debíamos morir cada día, o sea, necesitamos morir a nuestra carne para ser humildes y perdonar las ofensas.

Poner siempre la otra mejilla.
 
   La palabra del Señor nos enseña en Romanos 12:17-22: No paguéis a nadie mal por mal; procurad lo bueno delante de todos los hombres. Si es posible, en cuanto dependa de vosotros, estad en paz con todos los hombres. No os venguéis vosotros mismos, amados míos, sino dejad lugar a la ira de Dios; porque escrito está: Mía es la venganza, yo pagaré, dice el Señor. Así que, si tu enemigo tuviere hambre, dale de comer; si tuviere sed, dale de beber; pues haciendo esto, ascuas de fuego amontonaras sobre su cabeza. No seas vencido de lo malo, sino vence con el bien el mal.

   Nadie que haga daño quedará sin castigo delante de Dios. Él dice que puedes vencer el mal que pudo haber nacido en tu corazón haciendo el bien, ten cuidado de pensar que tu bien puede vencer el mal de otros. Nunca devuelvas el mal que recibes. Si tienes al Espíritu Santo contigo, no devuelvas a nadie el mal que te dé, primero busca vencer lo malo que tienes tú y que se traduce en el impulso de venganza. Recuerda que debes demostrar que eres hijo de la gracia y que el perdón es parte de tu vida.

   Yo soy blanco de difamaciones de personas que no entienden nuestro ministerio y compromiso con la obra del Señor. Intento que las calumnias no me afecten, pero hay veces que realmente es difícil. Cierta vez, estaba molesto y llorando en la casa por algo que escribieron en los medios de comunicación, entonces el Espíritu Santo vino a mí y me dijo: “¿Por qué estás triste por algo que debería darte gozo?” Fui sincero y respondí: “Porque no te lo hicieron a ti, me lo hicieron a mí, Señor”. Y me dijo: “¿Acaso no has leído en mi Palabra que eres bienaventurado y doblemente dichoso cuando se hable de ti todo tipo de mentiras, acosándote por causa mía y del evangelio?, ¿dónde está tu fe? Eres bienaventurado por las cosas que se dicen”. Entonces comprendí, me llené de gozo y le respondí: “Señor, bendigo a toda la gente, la amo de corazón y te pido que no busques venganza, que no haya ascuas de fuego sobre sus cabezas. Yo soy el ofendido y puedo pedir que no haya consecuencias sobre los actos malvados de mis enemigos”.

   Sin importar la ofensa que recibamos, debemos recordar que todos fuimos lavados por la misma sangre del Hijo de Dios, fuimos bautizados en las mismas aguas y fuimos llenos del mismo Espíritu. Somos hermanos en Cristo y nuestro Padre Celestial es justo. Tener el corazón libre de rencor es una bendición. Ofensas van y ofensas vienen, pero en nosotros está asumirlas con madurez y con el carácter de cristianos comprometidos en el amor de Dios
Cash Luna. El perdón. Manual para grupos en casa. Editorial vida.Guatemala 2010. Pag 3 a la 8

miércoles, 2 de noviembre de 2016

¿CÓMO DESARROLLAR UNA VIDA DE ORACIÓN CONSTANTE?


   Otro de los problemas más grande en los creyentes, en el área de la oración, es que desmayan y no pueden orar continuamente. No logran ver sus oraciones contestadas porque se dan por vencidos y no pueden mantener una vida de oración constante. A continuación, vamos a estudiar algunos puntos importante que nos ayudarán a tener una vida de oración continua y constante.

1-. EL COMPROMISO.
   El compromiso es tomar una decisión de calidad por un largo tiempo con todo el corazón y sin volver atrás.

   Este es el primer paso para poder tener una vida de oración constante y continua en nuestra vida. Nosotros mismos tenemos que tomar una decisión de orar todos los días. Sabiendo que sino lo hacemos, la voluntad de Dios está siendo obstaculizada en nuestra vida, y Dios no puede tener una comunión íntima con nosotros. Pero si oramos, Él nos puede revelar sus propósitos, porque Dios usa a los humanos para llevar acabo su voluntad. Dios quiere cambiar y tocar personas, paises, continentes, y poner en ellos el querer como el hace. Para eso es necesario mantener una vida de oración continua. También debemos entender que si oramos, estamos propensos a caer en tentaciones. Por eso, hay que tomar una decisión y hacer un compromiso de orar siempre.

¿Qué hacemos con el pueblo indeciso y sin compromiso para orar?

 14 Muchos pueblos en el valle de la decisión; porque cercano está el día de Jehová en el valle de la decisión.Joel 3.14

   Nuestro trabajo como ministros, es llevarlos a tomar una decisión de calidad, y ésta es la de desarrollar una vida de oración constante para que se acerquen a Dios y busquen su rostro.Los primeros que deben empezar a orar son los hombres, y después, sus mujeres y sus hijos.

   Hay cuatros mecanismos que pueden utilizar los hombres para provocar que la gloria de Dios o la bendición de Dios se derrame sobre un hogar o una cosa:

-. Ser los primero en servir. Cuando el hombre encabeza el servicio de Dios, la bendición se aumenta en su vida.

-. Ser los primeros en alabar y adorar. Ellos deben ser los primeros en levantar sus manos, en darle honra y gloria a Dios.

-. Ser los primeros en orar. Cuando el hombre es el primero en orar  y busca la presencia de Dios, la bendición se aumenta en su casa. El hombre tiene una autoridad que la mujer no tiene, y ésta es la autoridad de la bendición sacerdotal que se desata en la familia.

-. Ser los primeros en ofrendar. Cuando esto ocurre, las ventanas de los cielos se abren en las finanzas de un hogar. Cada hombre, jefe de familia, debe empezar hoy a hacer un compromiso para orar siempre.

2-. LA DISCIPLINA.

   La disciplina es someter nuestra carne a servidumbre para lograr una meta.

   La disciplina no es una meta, sino un medio para llegar a ella. En este caso, la meta es orar continuamente y con perseverancia. Usted no puede regocijarse en su disciplina, sino en su relación con Dios. La disciplina es el medio que nos ayuda al comienzo, para llegar a tener una vida de oración constante, y además, empezar una relación con Dios. Si ponemos la disciplina primero, eso nos ayudará a desarrollar autocontrol.

¿Cuál fue la disciplina de Pablo?

    27 sino que golpeo mi cuerpo, y lo pongo en servidumbre, no sea que habiendo sido heraldo para otros, yo mismo venga a ser eliminado.1Corintios 9.27

   Recordemos que la carne no quiere orar; es debil, no siente orar, pero tenemos que hacer un compromiso y tomar una decisión ahora mismo de orar todos los dias. Recuerde que la disciplina nos ayuda a someter nuestra carne a la voluntad de Dios. ¡Someta su carne!

3-. LA PERSEVERANCIA.

   Es la palabra griega proskarteresis, que significa insista. Ser fuerte hacia, perseverar, permanecer, quedarse en un lugar en vez de abandonarlo, consistencia, ser constante con una persona o cosa.

   14 Todos éstos perseveraban unánimes en oración y ruego, con las mujeres, y con María la madre de Jesús, y con sus hermanos. Hechos 1.14

 12 gozosos en la esperanza; sufridos en la tribulación; constantes en la oración. Romanos 12.12

 18 orando en todo tiempo con toda oración y súplica en el Espíritu, y velando en ello con toda perseverancia y súplica por todos los santos. Efesios 6.18

Existen tres grandes enemigos del creyente, los cuales son:

a-. El orgullo. Es el pecado que da origen a todos los pecados. Fue a causa de este pecado que Lucifer fue expulsado del cielo.

b-. El temor. Es un espíritu que te paraliza y nunca te deja triunfar en la vida (se le conoce también como temor al fracaso). Hoy dia, hay miles de creyentes paralizados por el miedo que necesitan ser libres.

c-. La falta de perseverancia. Mientras el orgullo da origen a cualquier pecado, el temor amarra y paraliza, y la falta de perseverancia, inmoviliza y no deja continuar. Éste es uno de los grandes enemigos del creyente. usted encontrará personas que empiezan proyectos y no lo terminan. También, empiezan a cambiar y paran de hacerlo, empiezan a estudiar y lo dejan, empiezan  a orar y no continúan: desmayan por la falta de perseverancia. Hay un montón  de metas, proyectos y propósitos no terminados como resultado de la falta de perseverancia. La inconsistencia es un gran mal.

   La palabra nos enseña que debemos perseverar en la oración, en la doctrina, en la salvación, en la gracia, en cumplir la palabra y en hacer el bien.

   Con frecuencia, nos fatigamos  y desmayanos en la oración. Oramos por un tiempo, pero despúes dejamos de hacerlo, y como resultado, nuestra vida espiritual se seca.

¿Qué dijo Jesús acerca de la persevarancia o de la consistencia?

 También les refirió Jesús una parábola sobre la necesidad de orar siempre, y no desmayar. Lucas 18.1

   En este verso, Jesús resalta dos puntos importantes:

1-. La oración es una necesidad. ¿por qué?... necesitamos tener comunión con Dios, pues éste es nuestro llamado. Dios quiere establecer su voluntad aquí en la tierra. Él quiere cambiar la voluntad de los hombres, y desea tener el derecho legal para trabajar en sus corazones. Recordemos, además, que necesitamos orar para no caer en tentación. Jesús dice que la oración es una necesidad.

2-. El orar siempre y no desmayar. La palabra desmayar significa "fallar en el corazón", perder el ánimo, no querer seguir. Jesús dice: La oración no solamente es una necesidad, sino que debemos practicarla siempre, siendo perseverante es todo momento. Debemos ponerle mucha atención a este punto porque es aquí donde muchos caen, Flaquean y no continúan.

¿Qué más habló Jesús acerca de perseverar en la oración?

 Pedid, y se os dará; buscad, y hallaréis; llamad, y se os abrirá. Mateo 7.7

   La palabra pedir en el griego es "aiteo" , que significa ruego, petición, súplica. La palabra denota pedir con insistencia. Así que, Jesús nos esta diciendo que debemos pedir con insistencia, que no nos demos por vencidos, que no desmayemos cuando no vemos respuesta y que sigamos adelante. Luego, Jesús entra en otra dimensión de oración, la cual llama buscad.

   La palabra buscar implica buscar a Dios con intensidad. Esto ya no es petición ni ruego, sino una búsqueda con deligencia; es buscar algo hastá encontrarlo. También, está palabra implica perseverancia, pero con mayor intensidad. El último nivel de la oración es  llamad.

   La palabra llamad, se traduce, también, como tocad y se os abrirá. Hay otra traducción que dice: tocara la puerta hasta que se caiga. Llamad o tocad, eso implica clamor e intensa búsqueda "hasta" que alla rompimiento. Esto es una insistencia desvergonzada, que se eleva hasta los límites. Como puede observar, Jesús dice:  pide y sigue pidiendo, pero sino vez resultado allí. Busca intensamente hasta encontrarlo. Si aún no ocurre nada, llama y toca a la puerta "hasta" que caiga. Antes de eso,no puede parar de orar. Cuando entramos en la unica parte, ya no es un clamor y un gemir, donde la oración nos lleva a dar a luz o parir algo en el espíritu. Debemos orar hasta que se logre un "hasta" (rompimiento). Veamos lo que dice Pablo en cuanto a esto:

19 Hijitos míos, por quienes vuelvo a sufrir dolores de parto, hasta que Cristo sea formado en vosotros. Gálatas 4.19 

No podemos soltar esos nuevos creyentes "hasta que allá un cambio de carácter en ellos.

¿Qué significa la palabra hasta?

    Es una duración de tiempo y espacio, ya sea largo o corto. Algunas veces, tenemos que orar unos "hasta" largos, y tenemos que estar luchando por mucho tiempo hasta que Dios complete la obra. Como lo fue el caso de Elías, que oró siete veces. La palabra "hasta" en el griego significa pegarse  a un propósito y no darse por vencido. Cada uno de nosotros debe pegarse a un propósito por el cual orar y no soltarlo hasta ver la victoria.

Algunos obstáculos que que impiden lllegar a un "hasta" son:
  • No ver cambios en la persona o cosas, por loa cuales estamos orando.
  • Cuando los resultados de la oración no van de acuerdo al tiempo invertido.
  • Los falsos reportes y los consejos de hermanos con palabras de desánimo; algunos tienen buena intención. Sin embargo, nos desaniman.
  • Distraerse de lo que está orando.
  Si realmente deseamos desarrollar una vida de oración continua   y permanente, tenemos que aplicar los siguientes principios: compromiso, disciplina y perseverancia.
Guillermo Maldonado. LA ORACIÓN.Tercera edición 2005.Editorial GM Internacional . Miami FL. Pag. 64 a la 68