CONSEJOS PARA EL BUEN CRISTIANO.
a-. Recuerda que ser cristiano significa un viaje de toda la vida
buscando el bien del prójimo. No esperes dejar atrás todo pecado de la
noche a la mañana, y no seas muy severo contigo mismo ni con otras
personas que veas fallar. Mantén los hábitos y principios éticos que tu
fe te permita practicar en la vida diaria, no para alardear al respecto
ni juzgar a los demás, sino para honra y gloria de Dios.
b-. Asiste a la iglesia y a una escuela bíblica para aprender más
sobre la manera en que Dios puede actuar en tu vida y sobre lo que
puedes lograr como cristiano.
c-. Si no eres cristiano, pero te gustaría serlo, acepta a Jesús en tu
corazón y acude a una iglesia cercana para aprender el Evangelio.
Deberás seguirlo a fondo, porque no existe un cristianismo a medias
tintas que no se deje engañar por el mundo; o apoyas de todo corazón a
Cristo o te alejas de él. Como el mismo Cristo dijo, no puedes beber del
cáliz del Seño al mismo tiempo que bebes del cáliz de los espíritus
mundanos o demoníacos.
d-. A pesar de que un pastor o una comunidad de creyentes te pueden
guiar hacia una vida cristiana, recuerda que lo más importante es lo que
sucede directamente entre tú y Dios. Si en verdad te arrepientes de tus
errores y pides su perdón, él te lo concederá y te permitirá vivir en
su amor, llevando su alegría y su mensaje de salvación aun cuando no lo
hayas aceptado en tu corazón a través de ningún intermediario.
e-. Jesús es un intermediario que te representa como si fuera un abogado ante el juez supremo: 'Sólo hay un Dios. Pero también hay un intermediario entre Dios y los humanos, un Mesías: Jesús Cristo en persona.
f-. Confía en Dios con todo tu corazón y podrás ver que los milagros ocurren.
g-. ¡Alaba a Dios, él te bendice ahora y en todo momento!
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